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Tus pinceles y brochas son herramientas básicas a la hora de maquillarte y, por ello, requieren de unos cuidados especiales y de una limpieza adecuada.

Si cuidas correctamente tus accesorios, durarán mucho más tiempo. Es importante limpiarlos ya que están en contacto con nuestra cara, ojos y labios, arrastrando maquillaje y también la grasa de la propia piel. ¡Imagínate la cantidad de gérmenes que se puede almacenar si no lo limpias con regularidad!

La frecuencia con la que debes limpiarlas depende del uso que les des, si te maquillas todos los días deberás limpiarlas una vez a la semana. Para aquellos pinceles que están en contacto con productos más pringosos sería recomendable aclararlos después de cada uso debajo del grifo, por ejemplo los pinceles para gloss de labios o bases líquidas.

El agua y el jabón serán tus aliados a la hora de limpiarlos. También hay productos hechos especialmente para dicho uso, que limpian y desinfectan, pero con agua y jabón quedan perfectos también. Mezcla en un bol agua templada con un jabón o champú neutro, si además añades un par de cucharadas de café mejorarás los resultados.

Para limpiarlas deberás meter las cerdas en el bol, no mojes el mango ya que puede deteriorarse. Limpia con tus propias manos los pelos, removiendo suavemente eliminando toda la suciedad. Después aclara bien y sécala con un pañuelo hasta que salga la suciedad.

¡Cuidado a la hora de dejarlas secar! Tumba la brocha en una superficie plana como la bañera o el lavabo y deja que se seque, nunca las dejes aplastadas o desordenadas ya que se estropeará la forma.

Además de la limpieza, tienes que tener un cuidado diario. En ocasiones, algunas brochas sueltan pelos, esto tiene fácil solución, con unos alicates puedes ajustar la parte metálica donde se unen todas las cerdas, apriétala para que dejen de caerse.

Otro problema común es que las cerdas se desgasten, si esto pasa, recorta un poco con una tijera  las puntas y así conseguirás una brocha perfecta de nuevo.

Ahora, además de conocer los tipos de brochas, ya sabes también cómo cuidarlas para que duren más.